
El SF25, el monoplaza del Scuderia Ferrari para la temporada 2025 de Fórmula 1es la encarnación de las altas expectativas de Maranello. Sin embargo, a pesar de su avanzado diseño y sus radicales cambios, el monoplaza tiene dificultades para ofrecer el rendimiento esperado en la pista. Una paradoja que bien podría ser el origen de sus primeras decepciones.
Lejos de ser un coche evolutivo, el SF25 representó un verdadero punto de inflexión para Ferrari. Más del 99 % del coche 2024 ha sido modificadoEl objetivo era mejorar el rendimiento aerodinámico y mecánico. Sin embargo, estos cambios pusieron de manifiesto puntos débiles inesperados en los dos últimos Grandes Premios. Entre los más notables estaba un compromiso necesario entre la gestión del fondo plano y la suspensión traseraEstos dos elementos son cruciales para el equilibrio del coche. McLaren tomó un camino similar en 2024, pero con resultados más convincentes hasta ahora.
Los ingenieros de Ferrari han introducido un gran número de cambios en el sistema de suspensión. Es un compromiso que parece bastante complejo de dominar en el SF25. El cambio de suspensión (a un esquema de bieletas de tracción) ha aumentado sin duda la flexibilidad de los reglajes, pero ha creado un desequilibrio en la gestión del chasis.
Para Loïc Serra, Director Técnico de Ferrari, la presión es enorme. Tras una temporada alentadora en 2024 y un comienzo catastrófico en 2025, el SF25 parece haber sido víctima de decisiones técnicas que le han salido mal a Ferrari.
Algunos medios de comunicación, como el sitio web AutoRacer.it, señalan con el dedo al El enfoque menos atrevido de Ferrari para la suspensión delantera. La escudería optó por un esquema de suspensión delantera de bieletas, como McLaren, pero este último llevó esta elección a un diseño aún más extremo. Al parecer, Ferrari estudió esta solución y juzgó que estas opciones eran demasiado arriesgadas, ya que no le permitían capitalizar las ganancias aerodinámicas y, al mismo tiempo, cumplir con las restricciones de la FIA. Sin embargo, McLaren parece estar recogiendo los frutos de sus audaces elecciones, con un coche capaz de competir con Red Bull.
Frente a la competencia y las promesas incumplidas, Ferrari se vio obligada a acelerar el proceso de modificación del SF25. El problema de la gestión del fondo plano y de la suspensión trasera ya está claramente identificado, pero queda por ver si los cambios que podrían aplicarse en Suzuka serán suficientes para devolver la competitividad al coche. Si la Scuderia quiere recuperar posiciones de podio, tendrá que llegar rápidamente a un acuerdo con la solución de McLaren para la suspensión delantera.