Stellantis: la fábrica de motores Fiat Firefly (GSE) y FIRE sigue ralentizándose a principios de año

La fábrica Stellantis en Termoli (Italia), sigue atravesando tiempos difíciles para la producción de motores de combustión interna FIRE y FireFly (GSE). En un momento en que el sector de la automoción experimenta una transición hacia los vehículos eléctricos, estos motores, antaño pilar de la producción de Fiat, ven oscurecerse su futuro. A principios de 2025, la central parece seguir funcionando en modo inactivo.

Descenso de la producción y expectativas de reducción de la jornada laboral

La producción de los motores Firefly, que propulsan modelos como el Fiat Panda y el Alfa Romeo Tonale, ha sido fuerte reducción durante varios meses. Con un menor volumen de pedidos, los sindicatos italianos revelaron recientemente que la unidad GSE (que produce los motores Firefly 1.0L y 1.5L) funcionaba ahora a un ritmo reducido. Se prevé pasar de tres a dos días laborables a la semana.

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Al mismo tiempo, la división de Incendios, que sigue fabricando motores antiguos, se mantiene bajo un Contrato de Solidaridad Défensiva (CDS). Así se evitan los despidos reduciendo la jornada laboral de los empleados. Sin embargo, este CDS no hace sino retrasar lo inevitable.

Una reconversión aún poco clara

Uno de los principales puntos de preocupación sigue siendo la incertidumbre en torno a la reconversión de la planta de Termoli. Inicialmente se había previsto un proyecto de Gigafactoría, destinado a transformar la planta en un centro de producción de baterías para vehículos eléctricos, pero se suspendió. Los sindicatos esperan respuestas concretas sobre el futuro de la planta. Según Marco Laviano, secretario de Fim-Cisl Abruzzo-Molise, "queremos que Stellantis nos llame y nos dé una idea clara del futuro de Termoli". Mientras tanto, "la agotadora espera continúa".

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La presión de la transición energética es palpable, y los modelos de combustión como los propulsados por los motores Firefly se están quedando gradualmente obsoletos. La llegada del Fiat 500 híbrido en noviembre de 2025 podría aportar un soplo de aire fresco a la planta de Termoli. Esta versión híbrida del Fiat 500, destinada a la producción en Mirafiori, podría insuflar nueva vida a la planta y a la producción de motores de combustión interna.

Sin embargo, hasta que llegue este plazo, la situación en la planta de Termoli sigue siendo tensa. Los trabajadores, ya afectados por repetidos paros de producción, temen que sus condiciones laborales se deterioren aún más. Hay que recordar que ACC, que pilota el proyecto de la gigafactoría, debe dar un nuevo plazo en el primer semestre de 2025.

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6 Comentarios

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  1. ¿Y si Fiat pusiera Firefly en todos sus modelos en lugar de PureTech? ¿Y si Junior adoptara Firefly en lugar de PureTech?
    De este modo, las fábricas italianas seguirían funcionando y los clientes potenciales preferirían coches italianos con motores italianos.

    • No podría estar más de acuerdo. Si no hay un motor italiano en un coche italiano, no lo compro. Y somos muchos los que pensamos así. Mi 595C todavía tiene mucho camino por recorrer.

    • Los Firefly híbridos están plagados de problemas - véase el Tonale. La única variante aceptable del Firefly es el 1.0L básico de inyección natural de 70 CV. Es tan simple que Fiat no podría estropearlo.

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